Todo lo que tenés que saber sobre EPOC


El 94% de las personas que tienen esta enfermedad son mayores de 50 años. Las causas más comunes son el tabaquismo y la contaminación del aire, por lo que está entre las enfermedades más frecuentes a nivel mundial.
¿Qué es la EPOC?
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es una afección respiratoria crónica, que agrede principalmente a los pulmones y a la capacidad para respirar, pero también puede producir lesiones a los músculos, corazón, huesos y al estado de ánimo general. Es la séptima causa de mala salud en todo el mundo y la tercera causa de fallecimientos.
Esta disminución de la capacidad de respirar se debe a que el EPOC consta de dos componentes fundamentales: la bronquitis crónica, y el enfisema. La primera es la inflamación y estrechamiento de los bronquios, que evita que los pulmones se vacíen con normalidad al expulsar el aire, y el enfisema es la destrucción de los alvéolos, por lo que resulta más compleja la expulsión de aire de los pulmones.
Los síntomas más frecuentes son:
→ Sensación de falta de aire (disnea) al realizar actividades diarias.
→ Tos con producción de mucosidad.
→ Respiración sibilante.
→ Opresión torácica.
→ Pérdida de peso, falta de apetito.
→ Sufrimiento emocional.
→ Debilidad y cansancio (en estados avanzados).
¿Cómo se diagnostica?
El primer paso es realizar una consulta médica, donde el profesional realizará un examen físico, estudios de imágenes como radiografía y/o tomografía de tórax, y la espirometría. Este estudio comprueba la salud de los pulmones a través de la medición de flujos y capacidades del pulmón. Para esto se realiza una primera prueba y luego se le pide al paciente que inhale medicación broncodilatadora, y luego de 15 minutos se repite para comparar los resultados.
Este método indoloro se utiliza tanto para diagnosticar la EPOC como para indicar la progresión de la enfermedad y efectividad de tratamiento.
¡Prevení la EPOC!
Existen factores de riesgo que aumentan las probabilidades de contraer esta enfermedad y que pueden controlarse: tabaquismo, exposición al humo de leña e inhalación de ciertos gases.
Tratamiento
Al ser una enfermedad crónica, la EPOC no se cura, pero puede mejorar dejando de fumar, aplicando vacunas antigripales y para la neumonía, con rehabilitación pulmonar, ejercicios aeróbicos y buena alimentación para evitar tanto el sobrepeso como la desnutrición.
El apoyo del tratamiento farmacológico es fundamental con broncodilatadores, que disminuyen el tono de la vía aérea y mejoran la disnea, y los corticosteroides inhalatorios u orales.
Ante cualquier duda, te aconsejamos consultar a tu médico o nutricionista de cabecera.
Fuente:
Departamento de Medicina Preventiva y Laboral, Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica
Ministerio de Salud Argentina, Guía de Práctica Clínica para el Diagnóstico y Tratamiento de la EPOC
Organización Mundial de la Salud, Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)